Tisana digestiva

Diciembre se ha convertido en el mes de los compromisos sociales por excelencia; un mes en el que vamos saltando de comilona en comilona y sarao en sarao como si del juego de la oca se tratara. Un “me fartuco” porque me lleva la corriente, vaya.

Y ya que hablamos de puentes… nada más volver de la Constitución muchas personas empiezan a jugar al tetris con su vida social y sus agendas para conciliar que si la cena de empresa, la de los amigos de la universidad, otra con los de toda la vida y todo ello sin olvidar la de los conocidos del instituto a la que bah, aunque ganas de ir haya pocas, de cotilleo, haylas.

Pero no sólo es eso. En los hogares, madres y abuelas se enredan en los fogones para cocinar como si no hubiera un mañana. Aunque lo cierto es que sí que lo hay: hay un mañana, un pasao, otro pasao… y así, nos tiramos hasta Reyes entre carnes, pescados, mariscos y turrones varios.

A estas alturas, todos deberíamos saber lo dañinas que pueden resultar estas comidas tan copiosas para nuestra salud, no sólo porque consumimos en 3 semanas lo que comeríamos en 3 meses sino porque tampoco damos una tregua a nuestro organismo para que se recupere y elimine las toxinas de una cena cuando ya nos estamos metiendo en la siguiente.

Por eso, y a sabiendas de que son fechas complicadas (aunque no imposibles) para cambiar hábitos alimenticios, te propongo que además de un poquito de mesura, incluyas en tus menús este “brebaje” que aliviará el malestar que provocan las digestiones difíciles.

Tisana Digestiva, ingredientes y propiedades

Esta tisana digestiva de anís verde, regaliz, hinojo, jengibre y naranja es un remedio delicioso y natural contra la indigestión y los gases.

El anís verde tiene propiedades antiinflamatiorias y carminativas  que al igual que el hinojo, alivia la gastritis y la aerofagia, siendo además uno de los remedios naturales habituales contra la dispepsia. A nivel intestinal permite aliviar los cólicos y protege la mucosa.

Por otro lado, el regaliz calma la acidez y ayuda a disipar la sensación de pesadez tras una comida. Pero ¡ojo! si padeces hipertensión, su consumo no es muy recomendable.

El jengibre, por su parte, estimula el páncreas provocando un aumento en la producción de las enzimas digestivas y además, su reseñable poder antibacteriano resulta muy eficaz para cuidar la flora intestinal y prevenir trastornos procedentes de alteraciones de la misma.

Para prepararla tú mismo, mezcla las siguientes proporciones:

• 3 cucharadas de anís verde
• 2,5 cucharadas de regaliz
• 1 cucharada de jengibre
• 1 cucharada de corteza de naranja
• 0,5 cucharada de hinojo

Déjala infusionar entre 6 – 8 minutos.

Tomada después de la cena te ayudará a hacer la digestión y conciliar el sueño. ¡Es tan relajante que ten cuidado no te vayas a dormir en el sofá!

Disfruta 🙂

Patty